Los ex patas

No se rían, por favor no lo hagan. La primera vez que recuerdo haber tenido nostalgia fue cuando se separaron Los Nsq y los Nsc. Era un domingo de 1996 o 1997 y Raúl Romero estaba en “La Revista Dominical” si no me equivoco. Yo creía que iba a hablar de algún disco o una presentación, las palabras del “feo” me dejaron helado. Dijo que el grupo se separaba por problemas internos. Mi mente de 5 años comenzó a volar, me di cuenta de que todo lo que me gustaba, todo lo que quería iba a terminar en algún momento. Creo que ahí me di cuenta de cuan efímera es la vida. Me decía a mi mismo que ya no podría crecer y escuchar en vivo “Las torres” o “Los patos y las patas”, canciones que me gustaban y a esa edad cantaba (en realidad las balbuceaba más que otra cosa).

El tiempo pasó, yo me olvide de lo sucedido, cambié la música por los libros y me refugie en la pequeñísima biblioteca que había en mi casa. Para el año 98 los Nsq se volvieron a juntar para unos conciertos en la feria del hogar y en el 2000 estuvieron produciendo un nuevo álbum, que no pasó nada con ese álbum, ni con los siguientes. Yo tuve la oportunidad de verlos en vivo cuando asistí al Festival Rock and Pop con mi hermana, debo de admitir que me divertí mucho con las idioteces de Romero, que salte al ritmo de Las torres y coree Magdalena (Negra,negrita, negra la consha tu mare...). Pero desde esa domingo en la noche del año 96 ó 97 yo no puedo evitar ponerme triste de vez en cuando al recordar todo lo que he vivido, al pensar en lo que viviré y voy a perder. Desde esa noche yo soy un nostálgico.